martes, 15 de septiembre de 2020

Capítulo 9



Héctor y Lupita ya están en España. Regresan a su casa después de comer en casa de los padres de ella.
--son manías mía o tu padre estaba enfadado...
--No, no son manías tuyas...
--¿¿y qué tanto hablamos con tu madre?¿ha pasado algo?
--sí y no me quería contar delante de papá para que él no se enojara mal.
--Pasa algo malo? es sobre mi? No le habrás dicho que...
Héctor tiene miedo que se vaya sabiendo que es esteril, que se dude de su hombría.
--No, no... no tiene nada que ver con eso... Nadie lo sabe... Es otra cosa... mi hermano se casa...
--no sabia que tenias un hermano --dice Héctor sorprendido.
--mi padre lo rechaza por ser gay... Yo ya me acostumbré a no contar con él, casi había olvidado que tiene un hermano.
Héctor traga saliva, le excita que su cuñado sea gay. Aunque también le asusta pensar que él pueda descubrirlo, le asusta lo que diría su suegro si supiera que no sólo su hijo es gay sino el marido de su hija también...
--tu hermano es gay ¿y lo sabe todo el mundo?
--Si, nunca lo quiso ocultar... No se avergüenza de ser gay... No tiene nada de malo ¿no?
Héctor fuerza una sonrisa. En realidad siente envidia de que él no se atrevería a enfrentar a todo el mundo.
--pero se casa... será para guardar las apariencias...
Lupita le sonrie:
--Benja jamás haría eso...
--pero si es gay y se casa...
--claro por eso viene a España a casarse.
Héctor sonríe tímido:
--claro... no lo había pensado...
Héctor no entiende bien del todo sus sensaciones. No sabe porque le pone tan nervioso la existencia de ese cuñado suyo.
--Benja no le tenía miedo a nada, se enfrentaba a quien fuera por lo que quería... Sólo así se explica que regrese para casarse...
--pero se habrán metido mucho con él...
--si pero no hizo caso... Lo que más le duele es darse cuenta que nuestro padre se avergonzaba de él por eso se fue a México hace tiempo... No supimos nada de él...
--No vino a la boda...
--papá no quiso que lo invitáramos...
--¿y él si nos invita?
--supongo... Nos lo ha hecho saber...
--pues tengo ganas de conocerlo... ¿no tienes fotos de él?
--No, papá las quemó todas cuando supo que era gay... luego en cierta manera lo aceptó pero prefiere ni verlo... No imagino cual será su reacción al verlo con un novio de la mano...
--supongo que debe ser duro para un padre, es su varón, su heredero... el que quería que fuera a su imagen y semejanza, la continuidad de la familia...
--es cierto... lo orgulloso que estaba mi padre de su hijo argentino...
--¿argentino?
--si, tú sabes que mi padre siempre se la ha pasado viajando... Mi madre tenía miedo de quedarse solas y mi hermano nació...
--así que compatriota mío...
y se calla y sonríe pícaro y para él dice:
--y estará guapo?
Le atormentan sus pensamientos:
--estás loco... ¿¡que piensas? --dice para sí.
Se reprocha así mismo que le excite el hecho que el hermano de su esposa sea gay, que desee que sea guapo.
--¡¡es tu cuñado... es casi tu hermano... así lo tienes que ver¡¡ --piensa Héctor que tiene las hormonas revolucionadas pensando en su cuñado gay.
--espero que le puedas hacer el favor a mi hermano --dice Lupita.
Héctor abre los ojos como platos:
--si está rebueno le hago todos los favores que quiera --piensa con deseo.
Héctor traga saliva:
--el favor?
Está muy excitado. Le encantaría que su esposa le diera permiso para acostarse con su hermano pero piensa que de ser así es porque debe ser muy feo. Lupita no sospecha del interés sexual que su esposo tiene para con su hermano:
--mi padre se niega a que el prometido de mi hermano duerma en la casa y mi madre tampoco quiere un conflicto... Ellos ya viven juntos así que ¿te molestaría a ti que ellos pasaran una temporada en nuestra casa?
Héctor sonríe:
--no claro que no... con mucho gusto...
A Héctor le pone muy cachondo el pensar que tendrá bajo su techo a una pareja de gay. No lo puede evitar y es algo que le angustia porque sabe que no debe pensar con deseo ni en el hermano de su esposa ni en el prometido de éste.
--con un poco de suerte ambos son feos porque si no... --dice Héctor que sabe que si son guapos no sabe cómo callará sus ganas de acostarse con ellos.


Sin imaginar que al otro del océano le espera un cuñado gay, argentino con el cerebro en la bragueta y que no hace más que pensar en él, Benja se está dando una ducha. Sale totalmente desnudo mientras se seca la cabeza. Felipe lo mira de reojo. Lo ama pero también lo desea. Le gusta verlo desnudo, mojado y en movimiento. Benja le sonríe. Le guiña el ojo. Lo mira con cariño. Felipe está con su equipaje:
--empacas todas tus cosas?
--si no... Si nos casamos es para quedarnos en España... para volver no tiene caso...
--¿y si nos va mal? Será ir con una mano delante y otra detrás...
Felipe lo mira muy enamorado. Está feliz, entusiasmado:
--seguro que nos irá bien... Tengo el presentimiento que en España sólo nos espera cosas buenas...
Felipe sonríe radiante:
--voy a España para vivir la felicidad, para empezar una nueva vida. Una vida feliz a tu lado.
Felipe besa la mano de su amado:
--la madre patria nos espera y sé que para bien, para vivir nuestro amor...
Benja le sonríe:
--no seas bobo, vamos sin dinero, sin trabajo... No tenemos nada...
--bueno pero tenemos este apartamento. Espero venderlo pronto así si no nos sale trabajo pronto nos podremos mantener... mientras nos podemos quedar con tus padres...
--Con mis padres no creo...
--y entonces...?
Benja le pone las manos en las mejillas:
--tú y yo nos presentamos... ya veremos dónde nos quedamos...
--bueno, espero que se solucione pronto los problemas...
Benja ve tan ilusionado a Felipe que no quiere que salga nada mal. Lo acaricia con cariño.
--todo va a salir bien... tú no te preocupes...
Felipe lo mira enamorado:
--todo saldrá bien si tú estás conmigo.
La pareja se abraza y se besa.


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